Trumpf en transición: innovación y estrategias globales, visión de Tom Schneider

Metal-Interface ha podido hablar con Tom Schneider, director general de Investigación y Desarrollo de Trumpf, una de principales empresas a nivel mundial del sector de las máquinas-herramienta para el mecanizado flexible de chapa y la tecnología láser industrial. Con una facturación anual de 5 400 millones de euros y una sólida presencia mundial, Trumpf es símbolo de innovación y excelencia tecnológica.

Tal y como explica Tom Schneider, la práctica tradicional de desarrollar productos en mercados centrales como Alemania, Austria y Suiza y luego comercializarlos a escala mundial ya no es efectiva en el contexto actual. En un mundo globalizado, las exigencias de los clientes de todo el mundo —desde EE.UU. hasta la India y México— son igual de elevadas. Esto plantea a Trumpf el reto de adaptar continuamente sus estrategias.

Según Tom Schneider, la estrategia de innovación de Trumpf se basa en la implicación de un gran número de jóvenes talentos y en el fomento de la autodisrupción. Por ejemplo, la empresa permite a sus empleados participar activamente en start-ups como Optimate o ScaleNC. Este tipo de desarrollo externo y validación de nuevas ideas acaba reforzando a la empresa en su conjunto.

La actual reorientación estratégica de la empresa pretende resolver el interrogante del papel que desempeñarán los servicios en 2030. Tom Schneider subraya la importancia de dar prioridad a los servicios para ofrecer a los clientes el máximo rendimiento minimizando el consumo de energía y la huella de carbono. Señala que esta nueva orientación hacia la sostenibilidad y la eficiencia es también una respuesta directa a las necesidades de los clientes.

Otro desafío crucial es la escasez de mano de obra cualificada, que está llevando a Trumpf a enfocarse enérgicamente en la automatización y la robótica. Tom Schneider ve la automatización no solo como una necesidad, sino también como una oportunidad para que la industria pueda garantizar una producción eficiente y de alta calidad.

Además, Tom Schneider ha hecho referencia a la economía de plataforma y su impacto en la industria manufacturera. Aunque descarta la formación de mercados, considera inevitables los ecosistemas digitales complementarios. Iniciativas como Manufacturing X y CATENA-X en la industria del automóvil son ejemplos de cómo Trumpf participa activamente en la configuración de estas infraestructuras digitales.

Para concluir, Tom Schneider destaca las ventajas de las fábricas inteligentes para satisfacer la creciente demanda de bienes industriales al tiempo que se reduce la mano de obra en las fábricas. En su opinión, la automatización inteligente es una oportunidad para crear puestos de trabajo atractivos y a la vez hacer que los procesos de producción sean más eficientes y sostenibles. La imagen de Trumpf ofrecida por Tom Schneider es la de una empresa que afronta con valentía los retos de la globalización, el progreso tecnológico y las necesidades cambiantes de los clientes. Con una clara visión de futuro y un fuerte enfoque en la innovación y la sostenibilidad, Trumpf se está posicionando como líder en la industria manufacturera.